Partagás. Shorts. Minutos. 22 de junio de 2013

     Partagás. Vitola de Salida Shorts. Vitola de Galera Minutos. Cepo 42 (16,67 mm). Longitud 110 mm. 3,35 Euros.
 

     Esta tarde de estío veraniego, aunque estemos en junio, vamos a degustar este minutos de Partagás en su vitola Shorts, este pequeño habano está realizado a mano con hojas de la Vuelta Abajo cubana, de tripa larga, dispone de un canon muy elegante, parejo en su conformación y más que correcto acabado de la perilla. A la vista nos ofrece un color colorado claro, algo raro en la marca, porque siempre que he tenido delante Partagás en la cava siempre han sido de tonalidades colorados maduros, incluso maduros, por ello llama la atención esta tonalidad tan bonita que presenta esta capa. Presenta un brillo aceitosa y con venas escasamente marcadas con uniformidad en el recorrido y un ligeros tonos en forma de moteado más oscuro. Se presenta al tacto muy suave, que hace que uno disfrute con la caricia de este ejemplar, dispone de un apriete a los dedos muy esponjoso, sin notoriedad de durezas en ningún parte del mismo. En el empaque se presenta sin variaciones en cajón corriente de 25 cigarros puros, con dos capas de 12 + 13 habanos separado con lámina de cedro, identificado con las siglas OGA y con fecha de manufacturación marzo de 2012. Una anilla que es todo un espectáculo, con un profuso fondo rojo con bordes dorados, en la parte inicial se muestran dos escudos, uno cuarteado con fondos alternados de campo en gules con torres en oro y campo en blancos leones rampantes en gules, el otro escudo dispone una cruz blanca con borde dorado en campo de gules, entre ambos y encima se dispone una corona en dorado y debajo de ésta una hoja de lis, a ambos lados de los escudos racimos de hojas de laurel en dorado, en la parte inferior del área descrita con antelación y con letras blancas la leyenda "PARTAGAS" y debajo de ésta "HABANA-CUBA". En los laterales con el fondo rojo intenso cuatro medallones circulares en cada lateral con distintos elementos, en los que se aprecia una cara humana de hombre barbado y otra de mujer, así como otros motivos escénicos que no permiten en la visión distinguir con claridad, al final de los laterales dos bandas rectas paralelas doradas rematan esta bella anilla de Partagás. El corte realizado antes del encendido con cortapuros de una hoja marca XICAR, con algo mas de la mitad del cepo, creo que en su justa medida, luego lo comprobaremos una vez encendido, resulta un corte preciso, limpio y sin descamaciones ni resaltos de la perilla. El aroma en crudo nos presenta notas de maderas, de bosque seco, tímida llegada de aroma animal. La fumada en crudo presenta notas muy leves de sabor especiado, con retrogusto de ligero dulzor, pero tampoco se hace muy matizables estos sabores en este momento.

     Un encendido en el exterior resguardado de corrientes de aire. Enciendo con varilla de cedro, consigo una buena brasa alrededor del puro que ayudo con encendedor bic, y agito con ligeros movimientos hasta completar el encendido. Nada más dar la primera calada al habano notamos que estamos ante una fumada partaguesera, nos depara un tiro excelente, ahora confirmamos que el corte ha sido el adecuado, con prolija cantidad de humo en boca, que hace todo un goce la expulsión al exterior. Una combustión no tan homogénea en la fase inicial del tercio, que necesita una ayuda en la rectificación de la misma para igualarse en el desarrollo. La ceniza muestra una tonalidad gris claro, con anillos perfectamente marcado y tonalidad más negruzcas, no presenta escamas, salvo en la zona donde se ha producido la rectificación. Cuando estamos concluyendo este primer tercio se produce la caída de la ceniza dejando una forma cónica en el habano. Con lo que al sabor respecta apuntamos matices de terrosos y maderas, con retrogusto de notas cafeteras o ligeramente achocolatada de tonos amargos, en ningún momento de este tercio me llegan sabores especiados. Y un aroma muy cubano, y especialmente notable inunda toda la zona que ocupo. La fortaleza de este primer tercio gira en torno a media.

     Aprovechamos la ocasión en la entrada del segundo tercio para enjuagar las papilas gustativas con agua mineral fresca, el tiro de nuevo resulta excelente, con una buena carga de humo en boca y una exhalación altamente densa y blanquecina, pero hay que estar atento a partir de este tercio, pues podemos tener alguna sorpresa desagradable. La combustión continúa heterogénea y dispareja, lo que me lleva de nuevo al rectificado, no me gusta calentar el habano, pero me molesta aún mas que el puro queme desigual. El sabor se incrementa, llegan notas más potentes, más presencia de tostado, menos llegadas de notas dulzonas y apuntes muy leves de especias, casi imperceptibles. Y que decir del aroma, pues que Partagás tiene toda la esencia de la isla, su olor te retrotrae a la misma, te lleva a estar presente en ella y tengo que decir que nunca he estado allí, pero en mi imaginación la recreo y debo errar escasamente de dicha presencia correspondida con este aroma. La ceniza compacta con variación del color debido al rectificado, pero se perciben tonalidades grises claras, escasez de anillos, algo despuntada. Aumenta ligeramente la fortaleza hasta situarse en medio-fuerte, vamos alcanzamos la fortaleza típicamente partaguesera.

     Al entrar en el último tercio cae por segunda vez la ceniza con un resultado rozando la planeidad, el tiro se mantiene excelente. La combustión en línea con los tercios anteriores, dispareja y heterogénea que afea totalmente la contemplación del habano en su reposo momentáneo en el cenicero. En cuanto al sabor nos ofrece este tercer tercio nuevas sensaciones con puntas más dulzonas, más potentes, ahora desaparecen los recuerdos especiados y queda un retrogusto de tostado amargo, como si acabaras de degustar un café pleno. Y de nuevo un aroma tan rico y tan agradable que hace realmente hermoso el momento. La ceniza pierde la tonalidad anterior y ahora muestra una ceniza gris más oscura y casi finalizando la fumada vuelve a caer la ceniza. La fortaleza aumenta y llega hasta la clásica fuerte de esta marca. Acabamos este momento tan cubano cuando alcanzamos los 68 minutos de duración y dejamos reposar a este digno ejemplar hasta su total apagado.

     Muy recomendable este Shorts de Partagás, además estás fumando un Alta Regalía a un precio absolutamente irrisorio. Una relación calidad precio inigualable. Solo anotar como parte negativa la mala combustión en todo el recorrido de la fumada, que hace molesto por las rectificaciones que se realizan, tal vez necesite estabilización en humidor y no fumar directamente de la cava. Por lo demás un mundo de sensaciones plenamente cubanas.

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San Cristobal de la Habana. El Príncipe. Minutos. 21 de junio de 2013

           San Cristóbal de La Habana. Vitola El Príncipe. Vitola de Galera Minutos. Cepo 42 (16,67 mm). Longitud 110 mm. 4,70 Euros.

          Es la segunda vez que realizo una reseña de la marca San Cristóbal de la Habana, recuerdo sobre todo en mi memoria la presentación a la vista y al tacto de aquel Muralla de la marca que me quedaron impresionados en la cava y en el posterior momento al encendido, ahora estamos delante de este pequeño habano, que se realiza a mano con hojas de la vega de Vuelta Abajo, presenta una manufactura pareja y correcta, con una acabado de la perilla casi imperceptible en su unión. A la vista se depara un color colorado, sin llegar a la tonalidad de colorado maduro, una capa ligeramente aceitosa y con venas marcadas sobretodo en la verticalidad del habano. Se presenta al tacto ligeramente suave por su textura aceitosa, con buena carga de tabaco y un apriete suave y esponjoso, en la que no apreciamos ninguna dureza ni irregularidad. En el empaque en la cava se presenta con ligeras variaciones en cajón corriente de 25 cigarros puros, con dos capas de 12 + 13 habanos separado con lámina de cedro, identificados con doble marcado por una parte las siglas OEB y con fecha de manufacturación mayo de 2007 y más abajo aparecen las siglas REV y con fecha de manufacturación enero de 2008, es la primera vez que veo una caja de habanos con esta doble identificación, me comentaron en la cava que era una caja reutilizada y que la correcta era la de REV con fecha enero 2008. Una anilla elegante con ornamentos circulares dorados que orlan la marca con letras amarillas (SAN CRISTOBAL DE LA) y doradas (HABANA) sobre fondo marrón carmelita debajo de la leyenda presenta una forma de cuero recortado en dorado, se remata la anilla a ambos lados con formas rectas paralelas sobre mismo fondo marrón carmelita con la leyenda en blanco a la derecha (CUBA) y a la izquierda (HABANA), el borde de toda la anilla es de color amarillo. El corte realizado antes del encendido con cortapuros de una hoja marca XICAR, con algo mas de tres cuarto de cepo, creo que ha sido excesivo el corte, que ha resultando recto pero con un leve descascarillado de la perilla que ha quedado muy escasa. El aroma en crudo nos presenta notas a maderas, incluso algún toque afrutado maduro, nos llega también pequeñas notas dulzonas. La fumada en crudo presenta notas de sabores terrosos, minerales.

            Un encendido en el exterior resguardado de corrientes de aire. Enciendo con varilla de cedro, consigo una brasa alrededor del puro, y agito con ligeros movimiento el habano para el encendido completo, antes de dar la primera inhalación de humo disfruto con el humo tan blanco e intenso que emana del habano. Gozo del aroma que se nos muestra amaderado, muy aromático, y se envuelve la atmósfera de una imponente presencia cubana, realmente es un olor muy rico. Se despliega un tiro excelente, con una buena muestra de humo, que inunda el lugar de una nebulosa blanca y espesa. Nos ofrece una combustión homogénea, con un desarrollo de ceniza de anillado concéntrico de color gris muy claro, intercalados con tonalidades más oscuras, no presenta escamas ni indicios de despeinados, no se produce caída de la ceniza en este primer tercio, por lo que se dispone de una prolija y vistosa ceniza. Con lo que al sabor respecta apuntamos matices de terrosidad, con puntas de levísimo amargor y queda inmerso en el paladar un retrogusto de tostado con notas de ligero dulzor. La fortaleza de este primer tercio es suave.

             En el segundo tercio el tiro se mantiene excelente, de nuevo una buena carga de humo en boca y en la exhalación queda una buena bruma en el ambiente. La combustión otra vez homogénea como en el tercio anterior. El sabor se acompleja y ahora llegan notas de tostados más preeminentes, se añaden algunos toques especiados, que se hace también presentes en el aroma que hace que gane muchos enteros. La ceniza tan prolija del tercio anterior ahora cae en el cenicero y deja un resultado cónico, en este tercio la forma y color no varia con respecto al tercio anterior. Aumenta ligeramente la fortaleza pero sin llegar al término de medio, lo situamos en suave-medio.

             Al entrar en el último tercio refresco el paladar y la lengua con agua mineral fresca para finalizar diremos que el tiro de nuevo se sitúa en la excelencia, tal vez el corte no fuera tan exagerado como preveía al principio y eso junto con una ligada adecuada del habano ha hecho que en lo referente al tiro se haya comportado de una manera ejemplar. La combustión en línea con los tercios anteriores, homogénea y pareja en todo su recorrido. En cuanto al sabor nos ofrece nuevas sensaciones a puntas más melosas y melifluas, consiguiendo una textura sedosa en el paladar, quedando una especie de regusto dulzón que mezclado con el aroma con notas más especiadas e intensa hace que el momento se convierta en sublime, siento repetirme pero el aroma es todo un espectáculo, al final desaparece el dulzor y llegan notas más potente de tostados. La ceniza pierde la intensidad del gris blanco inicial y ahora presenta una gama de grises más oscura, de nuevo con anillado, pero sin escamado ni muestras de ningún tipo que afeen la visión del habano en esta fase, apuro el habano y de nuevo resurge la compacidad de la ceniza y muestra todo su esplendor y elegancia inicial. Cae la ceniza por segunda vez en el desarrollo del tercio y se nos presenta una forma totalmente plana. La fortaleza se mantiene en los niveles del tercio anterior y queda en el entorno del suave-medio. El goce y regocijo termina después de apurar el habano hasta quemarme los dedos con una duración de 71 minutos y allí descansa emanando tímidos hilos de aromático humo.

              He de destacar de este pequeño habano que ofrece un aroma espectacular, muy aromático, muy cubano y como dije con la reseña de su hermano mayor Muralla, solo lo superan los figurados de Cuaba. Cabe señalar que para estos formatos es mejor definir la reseña en dos mitades, porque tres tercios se hace más complicado. Por último anotar que este formato es muy adecuado cuando el tiempo disponible es escaso, pues hace disfrutar durante el mismo de una agradable fumada. Muy recomendable este Príncipe de San Cristóbal de la Habana.



H.Upmann. Petit Corona. Mareva. 20 de junio de 2013

              
                H.Upmann. Vitola Petit Corona. Vitola de Galera Mareva. Cepo 42 (16,67 mm). Longitud 129 mm. 5,85 Euros.

               Ayer pasamos un buen momento con el Petit Corona de El Rey del Mundo y hoy nos toca la misma vitola pero ahora de H.Upmann, este ejemplar está realizado a mano con hojas de las famosas vegas de Vuelta Abajo en Cuba. Presenta una manufactura pareja, con una presencia a los ojos de un color colorado maduro, con marcadas venas y una textura algo tosca, aunque presenta zonas más sedosas de textura aceitosa, el acabado de la perilla es algo irregular afeando el canon de este habano. Al peso contemplamos una buena carga de tabaco que comprobamos con un apriete suave y esponjoso pero con alguna zona de una dureza excesiva. Se presentaba sin variaciones en el empaque que se dispone en cajón corriente de 25 cigarros puros, con dos capas de 12 + 13 habanos separado con lámina de cedro, identificado con las siglas ROA y con fecha de manufacturación septiembre de 2006. Una preciosa anilla con ornamentos geométricos dorados sobre fondos blancos y rojos, el centro ocupado por una venera dorada con fondo blanco, alrededor se disponen las letras blancas de H.UPMANN en curva y debajo en recto se lee en letras blancas HABANA y debajo de ésta CUBA, sobre fondo rojo y orlando la marca dos racimos de laurel dorados, se remata la anilla a ambos lados con formas geométricas circulares de borde dorado con fondos blancos y rojos, sin leyenda. El corte lo realizo después del encendido con cortapuros de una hoja marca XICAR, con algo mas de la mitad del de cepo, resultando adecuado, limpio y recto en el corte. El encendido lo realizo con varilla de cedro. El aroma en crudo nos ofrece sensaciones a cacao y chocolate, con notas reminiscentes dulzonas. No puedo disfrutar de la fumada en crudo al realizar el corte posterior al encendido.

               Un encendido en el exterior resguardado de corrientes de aire, con la misma placidez y tranquilidad de momentos anteriores. Enciendo con varilla de cedro, rematado con mechero bic, cuando dispone de un buen aro de brasa, y posterior a la sensible agitación, dejo que desprenda un aroma muy dulzón previo al corte, después de algún minuto disfrutando de este olor a habano ejecuto el corte. Se presenta a nosotros un tiro excelente, con una cantidad de humo abundante y prolija, incluso yo diría que excesiva. Nos ofrece una combustión homogénea pero con algún tramo disparejo que corrige solo en el desarrollo sin necesidad de rectificación con ayuda externa. Una ceniza compacta de color gris claro, con finos anillos concéntricos de tonalidad más oscura, no hay presencias de escamas, cabe destacar que la primera ceniza cae demasiado pronto y nos deja una forma ligeramente cónica casi plana. El aroma es dulce y meloso, potente incluso reseñable para estar en exterior. El sabor que nos adelanta este puro son los dulzones con cacao, chocolate, como anotación negativa me llegan matices metálicos que espero que vayan desapareciendo en la fumada, al final de este tercio parecen llegar tímidos sabores especiados pero muy ligeros. La fortaleza de este primer tercio la debo situar en suave.

               Al comienzo del segundo tercio el tiro se mantiene excelente, con la misma cantidad de un humo blanco que envuelve la estancia donde nos encontramos en un rincón ciertamente habanero, la combustión ahora si es totalmente homogénea. Con lo que respecta al sabor han desaparecido los desagradables matices metálicos y ahora no llegan con tanta rotundidad los sabores del tercio anterior, y aunque se mantienen las notas de cacao y chocolate, aparecen también puntas tostadas, mezcladas con ligero retrogusto especiado. El aroma igual de potente, de notas dulzonas, con algunos matices leves de especias, tal vez unos apuntes de oloroso clavo, en todo momento nos llega a nosotros la presencia de su origen cubano. La ceniza vuelve a depararnos una compacidad de un color gris claro, con algunos anillos concéntricos de mayor tonalidad oscura, cuando vuelva a caer la ceniza resulta una forma plana. La fortaleza se mantiene en el mismo entorno de suave. A mitad de este segundo tercio aparece la indeseable llegada del apagado del habano, tan molesta siempre, que hace que comience de nuevo el ritual del encendido. Aprovecho la potencia y eficacia del cortapuros Xicar dando un corte para sanear toda la zona quemada y restituir la fumada en origen. Ahora en vez de varilla de cedro, utilizo por comodidad el encendedor Bic.
          
               Una vez reencendido el habano y con una buena brasa que cubre la totalidad del diámetro del mismo, limpio con agua mineral las papilas gustativas y entramos en la fase final con el tercer tercio, en el que otra vez el tiro resulta excelente como en los tercios anterior, con una carga abundante de humo en boca, que hace el deleite del fumador con la exhalación continua y duradera del mismo. La combustión se torna en heterogénea, puede ser debido al reencendido o tal vez la dureza que sentimos en la fase organoléptica inicial, lo que me lleva a realizar la rectificación con el encendedor. El sabor ahora se endurece, no sé si debido también al reencendido, pero llegan algunas notas amargas que no me hacen disfrutar en exceso del inicio de este último tercio, a medida que avanza el tiempo llegan de nuevo los tonos dulzones, pero ahora no tan matizado como anteriormente. El aroma continúa muy aromático y potente como los tercios anteriores. La ceniza nos ofrece una tonalidad gris clara, de buena compacidad y algunos anillos concéntricos, de nuevo cae la ceniza y nos ofrece una forma plana ligeramente cónica. La fortaleza aumenta considerablemente y se torna en media, incluso media-fuerte, después de una duración de 70 minutos dejamos relajarse al habano para morir con dignidad en el descanso del cenicero.