domingo, 19 de julio de 2020

Sancho Panza. Belicosos. Campanas. 19 de julio de 2020

     Sancho Panza. Vitola de Salida Belicosos. Vitola de Galera Campanas. Cepo 52 ( 20,64 mm). Longitud 140 mm. 10,00 Euros.

      Otro regalo de lo que me gustan, un habano figurado que me regalaron allá por enero de 2016 mis queridos Amigos Vaquero Clemente (Jose y Maribel), me encantan los presentes en forma de habanos, es éxito asegurado.

     Me encantan los figurados, sobre todo los de la marca Cuaba, que son tan apreciado por mi. Además que es el culmen del torcedor más avezado y que gozan de más prestigio en esa profesión artesanal y tan bella como es la de torcedor.

      Siempre me han gustado los habanos figurados, por su construcción, por su manera de fumarlo, por la liturgia empleada en toda la fumada, y son varios los figurados simples que he fumado, recuerdo ahora el Petit Belicosos de Bolívar, o la Pirámides nº 2 de H. Upmann, la Pirámides nº 2 de Diplomáticos, la Muralla de San Cristóbal de la Habana, el Short Hoyo Pirámide de Hoyo de Monterrey edición limitada 2011, el Únicos de Vegas Robaina y como para olvidar aquella Pirámides de Cuaba Edición Limitada de 2008.

     Tenemos ante nosotros una labor de simple figurado, una manufactura bella realizado a mano con hojas de las vegas cubanas de Vuelta Abajo. Viste una capa típica de la marca, con un tratamiento venoso, ligeramente aceitoso, que ha dormido en mi humilde humidor a temperatura y humedad controlada durante cuatro años, aparte de lo que durmió en su empaque en la cava, siendo su fecha de fabricación en julio de 2006. Por tanto son 14 años de guarda, ahora que ya es difícil encontrar en las cavas labores con fecha de fabricación antiguas. El empaque de este belicosos viene en cajón habilitado de 25 habanos divididos en dos capas de 12 + 13 habanos y marcado con las iniciales SML. Este habano es el único que sigue continuado en la marca de Sancho Panza. Un anillado sencillo que pasa casi desapercibido en la vestidura del habano, donde solo sobresalen las letras en color blanco, es una anilla de cuerpo central circular con fondo de marrón tabaco en la que se imprimen en letras blancas la marca “SANCHO PANZA” en el centro, acompañado en la parte superior “HABANA” y en la inferior “CUBA”, en los laterales de forma recta de mismo fondo de color marrón tabaco solo decorado con un fino recuadro de borde blanco en la que se insertan la leyenda a la izquierda “SELECCION” y a la derecha “DELAMONTE”, viendo en la web de Cuban Cigar se trata de la banda estándar C. Recorro con los dedos la longitud del habano y no encuentro alguna parte más dura que otra, pero en general la construcción se asemeja acertada, queda una ligera capa aceitosa en los dedos. Es una labor que me gusta y me atrae. Lo paso por el peso y nos da un resultado de 14,47 gramos siendo el peso oficial de 12,45 gramos, por lo que la carga de tabaco es más alta y eso nos va a permitir una buena fumada, aunque tal vez tengamos problemas con el tiro. Me encanta que la carga de tabaco sea abundante, ahora que se estila que la carga sea menor que el peso oficial. El aroma en frío nos da notas amaderadas, fondo mineral en la capa y en la cabeza aspiramos con aromas más matizados de maderas, dulzones, melosos, sin nada de picante.






Comenzamos el encendido de esta pirámides con tranquilidad, dando candela con encendedor Bic, de forma pausada, girando el habano hasta crear ese primer anillo de brasa completo y luego movimientos de muñeca para que la brasa ocupe la totalidad del cepo. He cortado la perilla casi a mitad del cepo, tal vez tenga que rectificar luego, pero de momento comienzo de esa forma. Los aromas del encendido es algo sublime, soberbio, insuperable, bueno puede que sea superable con la primera inhalación de humo en boca. Los aromas que se desprende de este inicio de tercio son amaderados, cubanos, ligeramente dulzones. En boca ya nos indica lo que el aroma nos da, en la primera calada pasa el humo de forma suave, delicada, sutil dando un rico gusto amaderado y dulzón, no asoma la salinidad típica de la marca, tendremos que esperar al desarrollo de la fumada, nos da a lo largo del primer tercio sabores empíreos de pan reciente, ligeros tostados y frutos secos, al final del primer tercio llegan notas especiadas. Lo que si entra redondo en boca es el humo, un humo sedoso, ligero, fino y gustoso, que no da bocanada intensa de humo, porque tenemos problemas con el tiro, que comienza siendo dificultoso, tal vez por la carga de tabaco que decía anteriormente o bien por el corte dado. El paso por nariz da matices suaves de maderas. La fortaleza en este primer tercio es suave, la combustión al principio se emplea homogénea pero al final del tercio tengo que rectificarla con el encendedor, la ceniza se presenta compacta, prolija, sin despeine con tonalidad gris clara casi blanca, sin anillos ni rodales.




En el segundo tercio lo iniciamos con la caída de la ceniza que ha permanecido compacta, prolija, bella, hermosa y sin despeine, siendo blanco intenso su color en el desarrollo de la labor y colores que se tornan marronaceos en la parte inicial del mismo, la caída de la ceniza nos deja una forma ligeramente cónica. Seguimos teniendo problemas con el tiro, y la combustión sigue siendo heterogénea con rectificación de la capa, que tiene una cosa positiva y es que al quemar la capa se desprende unos aromas muy ricos e intensos. A mi que me gusta la quema pareja, sufro mucho cuando no se produce la misma de forma correcta. Los aromas siguen siendo amaderados, empíreos, con notas picantes. El sabor se va matizando con respecto al tercio anterior y tenemos la llegada de matices salinos y yodados aunque de forma ligera y no tan notorias como en otras labores fumadas de la marca. La ceniza vuelve a comportarse de forma compacta, prolija y con matizaciones del color debido a la quema obligada de la capa para igualar la combustión. Y aunque en este tercio aumenta algo la fortaleza la podemos clasificar como suave media. Yo que soy más de fortalezas suaves y medias estoy feliz con este cigarro de alta regalía.




Y entramos en el último tercio con una rectificación que tal vez haya llegado tarde y es que empleo de nuevo el cortapuros y hago un corte a casi tres cuartos del cepo, con esta operación mejoro el tiro, que tanto problemas me ha estado dando durante la fumada, eso y la quema dispareja me han estado molestando durante todo el desarrollo de la fumada. Ahora el tiro mejora, entra más humo en boca y me recreo que la exhalación del mismo, dibujando figuras imposibles que desaparecen en este horizonte de tarde canicular. Cae por segunda vez la ceniza entrado ya este último tercio, con un resultado igual que la caída anterior, es decir cónica. La combustión en este último tercio permanecerá ya homogénea con una sola rectificación. Los aromas se matizan más, aunque el predominio de la madera es primordial. Los sabores siguen parecidos al tercio anterior y lo que si llegan con mayor profusión ahora es el sabor salino que le da la identificación a la marca de Sancho Panza. Se incrementa la fortaleza y llega a un nivel medio. Dejamos reposar a este belicosos después de una fumada interesante de 96 minutos para que el solo culmine su labor y su entrega.





Me gustan los habanos figurados y hemos disfrutado esta tarde de este regalo de amigos, y en la fumada estuvieron presentes ellos. Me alegra que Sancho Panza siga con este Belicosos en su exiguo vitolario.

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